Más allá del evidente golpe bajo que representa el spot que revictimiza a una familia víctima de inseguridad, lo peor del caso es que era justamente Patricia Bullrich la que estaba a cargo de la seguridad cuando el hecho ocurrió.

El hombre en cuestión fue asesinado en febrero de 2019 cuando Patricia Bullrich era la ministra de seguridad del gobierno de Mauricio Macri.