Si hay algo que todos le destacan a Sergio Massa es la picardía, esa que junto a una simpatía natural le permitió saltar de la intendencia de Tigre a jugar en las grandes ligas de la política nacional.

Al mismo tiempo siempre ha tenido diálogo con todos los sectores y su capacidad de armado es llamativa, eso le permite moverse con comodidad en cualquier ámbito.

Por eso la chicana a Mario Negri cuando le objetó que se hablara de la deuda externa, fue tomada con risas aun por los de su propio espacio que lo acompañaban.