Guerra contra la inflación: las patronales del campo y la oposición amenazan al gobierno
Por medio de un decreto, la Casa Rosada oficializó la creación del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino con el objetivo de reducir el impacto de la suba del precio internacional. Distintos sectores rechazaron la iniciativa oficial.
El Poder Ejecutivo Nacional oficializó la creación del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, con el objetivo de estabilizar el costo de la tonelada de trigo que compran los molinos argentinos, a través del decreto 132 publicado este sábado en el Boletín Oficial.
Asimismo, con la publicación del decreto 131/22 modificó el actual esquema de retenciones de los productos derivados de la soja, como lo son el aceite y la harina, a partir de la quita del diferencial entre los productos industrializados y los sin procesar dentro del complejo sojero.
De esta manera, estos subproductos pasarán de tributar 31% al 33% en concepto de derechos de exportación, lo que implica una suba de dos puntos en la alícuota, hasta, por lo menos, el 31 de diciembre de este año.
La creación de este Fondo Estabilizador formó parte de los anuncios económicos formulados por el presidente Alberto Fernández, a fin de reducir el impacto local de la fuerte suba del precio internacional del trigo como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania, dos países que concentran casi el 29 por ciento de las exportaciones mundiales de este cereal.
En ese marco, referentes de las patronales del campo salieron al cruce de la decisión del Gobierno de aumentar las retenciones para la harina y el aceite de soja, y crear el Fondo de Estabilización del Trigo para controlar el precio de la harina.
“El impacto es para toda la cadena agroindustrial. Es quitarle competitividad al sector que más potencial tiene en Argentina y que tiene la oportunidad, con estos mejores precios, de que el productor los reciba y aumente la producción para generar más trabajo”, señaló Luis Zubizarreta, presidente de ACSOJA (Asociación de la Cadena de Soja Argentina).
En tanto, la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) rechazó la suba de derechos de exportación para la harina y el aceite de soja al 33%, que el Gobierno publicó este sábado en el Boletín Oficial y consideró a la medida como “un atentado contra la industrialización de la soja en el país”, que “no tiene legalidad”.
En ese sentido, interpretan que “el Poder Ejecutivo perdió las facultades delegadas del Congreso Nacional y el decreto 131/2022 debe ser refrendado por la Comisión Bicameral. Y advirtieron que “las empresas agroexportadoras están analizando todas las acciones judiciales para cuestionar el referido decreto”.
Asimismo, el diputado cordobés Mario Negri expresó: "El Presidente llegó a la batalla contra la #inflacion muy débil por los embates de su propio partido. Para llamar a una gran acuerdo nacional se necesita fortaleza. Hoy no hubo anuncios, sólo la insinuación del garrote de la Ley de Abastecimiento. Día #1 de la Guerra: muy pobre".
Por su parte, el diputado nacional de Avanza Libertad José Luis Espert expresó: "El Presidente dice ahora que si es necesario, aplicará la Ley de Abastecimiento. Con @CarolinaPiparo en #AvanzaLibertad fuimos los primeros en presentar un proyecto para derogarla e impedirle al Estado que controle precios y la producción"