Tras una inesperada derrota, Javier Milei se muestra dolido y derrotado como nunca. Con la voz cascada, mal dormido y todavía en ascuas por lo que pasó, el candidato libertario busca los votos de JxC.

“Nosotros estamos dispuestos a dejar de lado lo que ocurrió en el pasado”, dijo Milei, quien hace menos de una semana, en el cierre de campaña cantaba y vitoreaba "el que no salta es radical” en pleno escenario. 

Así las cosas, el libertario se esperanza con que el odio al kirchnerismo le ayude a recuperar los votos necesarios para ganar la segunda vuelta. 

La sensación de que su discurso del odio tiene un techo se hace palpable en el giro discursivo que metió cuando todavía no pasaron ni 24 horas del mazazo electoral. 

Pero para atraer el voto de Juntos por el Cambio no comenzó de la mejor manera ya que trató de “traidores” a los radicales.

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