El gobierno de la Ciudad renovó la habilitación de un prostíbulo encubierto
La Agencia Gubernamental de Control (AGC), a cargo de Juan Gómez Centurión fue la que decidió renovar el último abril la habilitación de un boliche en el barrio de Recoleta que funciona como una casa de citas oculta.
Se trata del local New Port que había sido clausurado por el juez federal Ariel Lijo, luego que vecinos de la zona denunciaran el lugar y se realizaran una serie de operativos que terminaron con cuatro personas detenidas y los testimonios de cuarenta mujeres que ejercían la prostitución.
"La AGC estaba notificada de la denuncia que pesaba sobre este lugar", aseguró Lucas Schaerer, miembro del colectivo La Alameda, pero sin embargo decidieron rehabilitar el lugar.
"Renuévese a partir del 1 de abril de 2015 y por el término de un (1) año la inscripción en el Registro Público de Lugares Bailables (…) que opera con nombre fantasía 'NEW PORT'", puede leerse en la página 182 del Boletín Oficial de la Ciudad a pesar de que el lugar esté denunciado como un "narcoprostíbulo".
"No sorprende que el PRO continúe habilitando este tipo de boliches. Macri lanzó su campaña de 2003 en el boliche Shampoo, que pertenecía a Gabriel Conde, hijo de Luis Conde, vicepresidente de Boca. Funcionaba como prostíbulo y fue denunciado y finalmente clausurado", aseguró el legislador Gustavo Vera.