“En el día de ayer no hubo gas prácticamente en el país. Por suerte estamos en recesión, entonces la industria gasta menos gas para producir”, dijo el oficialista Fabián Doman. 

El periodista intentó explicar las razones por las que se llegó a esta crisis energética que dependió del presidente de Brasil, Lula Da Silva, para que no nos muramos de frío

Como se sabe, producto de la desinversión libertaria, ahora el país debe comprar gas por diez veces el valor que salía la obra que se paralizó.

“Cuando se juntaron Alberto y Milei se tendrían que haber juntado para decirle que esta obra (la del gasoducto) hay que teminarla”, justificó Doman. El argumento es hasta ridículo, o no tanto, si se piensa en la protección mediática de los medios donde trabaja. Porque los pedidos para que la obra de los compresores se realiza, vienen desde diciembre.

Al igual que en el pasado, el vocero Manuel Adorni intentó echarle la culpa al gobierno anterior y al clima.