Antonio Aracre fue uno de los inventores de lo que se conoció como “dólar soja” que no era otra cosa que una devaluación encubierta que beneficiaba a los productores agropecuarios, pero ahora parece haber cambiado de idea, como cambió de jefe.

Guillermo Moreno le recordó su doble vara en materia económica y el hombre llegó a asegurar, a cara de piedra, que durante el primer año de Milei no se había afectado el desempleo.

Obviamente le Colo Costantino no se la dejó pasar y le tiró por la cabeza el número de empleos formales destruidos en los últimos doce meses