La presidente Cristina Fernández se reunió en la residencia de Olivos con la comisión ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina, que fue representada en su titular José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe. Durante la reunión le transmitieron sus preocupaciones por la extorsión policial y la lucha contra el narcotráfico.

Arancedo calificó al encuentro como "cordial" y  "respetuoso" e insistió en que pidieron conversar con la Presidente porque "nos sentíamos preocupados por muchos temas". Sobre el levantamiento de las fuerzas de seguridad dijo que "un conflicto policial no puede dejar huérfana a una ciudad", en referencia a los actos vandálicos que se vivieron en numerosas provincias.

"Esto no puede volver a pasar", pidió y recomendó: "Si hay dificultades hay que encontrarse y dialogar".

Pero este no fue el único tema planteado, ya que manifestaron "preocupación por el narcotráfico" por el "daño que está creando el avance de las drogas" en el país. "Acá hace falta una respuesta de toda la sociedad", opinó el titular de la Conferencia Episcopal Argentina.

Más tarde, la jefa de Estado recibió a las autoridades de la Federación Argentinos de Iglesias Evangélicas, encabezados por su titular, Néstor O. Míguez.