La situación fue extrañísima porque Facundo Pastor es un periodista con el cuero curtido, con años de profesión, que reaccionó ofuscadamente cuando le llegó una amenaza a su celular.

Si bien había dicho que había recibido cosas similares en sus redes sociales, está vez lo alteró que le llegaran mensajes intimidatorios a su teléfono.

Al mismo tiempo parecía tener una idea bastante clara de quién estaba detrás de la operación y dio la sensación de dirigirse a él cuando le habló directo a la cámara.