Si ante una misma situación se obra de manera diferente estamos ante un caso claro de distinta vara. Eso es lo que ocurrió en el gobierno libertario con el pedido de disculpas del seleccionado dirigido por Lionel Scaloni con Francia por la canción ofensiva que cantaron en el micro.

Mientras a Julio Garro, por decírselo a María O'Donnell lo echaron de su puesto de Subsecretario de Deportes, al Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ni lo rozó la discordia.

Cuando no se entiende la razón de una acción es porque existe otra razón oculta que lo impulsa. En este caso no puede dejarse de lado la sorda batalla que libran los alfiles de La Libertad Avanza contra Mauricio Macri.

Garro era una figura puesta por el macrismo para tratar de imponer el proyecto de las Sociedades Anónimas Deportivas en el fútbol y la ‘boutade’ con la selección, no parece más que una excusa para deshacerse de él.