“En los años 90 gobernaron a favor de los grupos financiaros internacionales”
Continúa el debate en el programa de la TV Pública acerca del fallo a favor de los fondos buitre, y en este sentido, el economista indicó: “Es una situación muy desfavorable para la Argentina”.
El programa 678 continúa con el debate acerca del fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos en contra de Argentina y a favor de los fondos buitre, y este domingo, se sumó el economista Mariano Kestelboim para analizar la situación del país tras la decisión del máximo tribunal norteamericano que beneficia a los “grupos especulativos que tratan de ganar plata a costa de las leyes que regulan el sistema financiero internacional”.
“Es una situación muy desfavorable para la Argentina”, indicó el economista, quien no descartó la posibilidad que algunos de los fondos buitre sean argentinos, tal cual le consultaron en el programa, ya que según estima, “el amor por el dinero supera al amor por la patria”.
Kestelboim recordó “todas las políticas que se tomaron en los años 90”, donde, de acuerdo con el economista, “los funcionarios gobernaron este país en contra de las necesidades del pueblo y a favor de los grupos financiaros internacionales”, y además disparó: “Era un estado hostil a las necesidades del desarrollo productivo de la Argentina, que favorecía a los grupos financieros, endeudándose de cualquier forma con el megacanje, el blindaje, préstamos garantizados”.
“La complicidad de los grandes medios de comunicación se expresa en que en los años 90 hablaban de ‘los aportes del Fondo Monetario Internacional, la asistencia del Banco Mundial, la ayuda de estos grupos’, como si no había contrapartida”, rememoró el invitado de 678, al tiempo que aseguró que él, en ese momento, “no podía entender como los diarios no decían nada sobre las tasas de interés que se estaban pagando”.
En cuando a la estrategia a llevar a cabo, para Kestelboim “el plan que hay que aplicar, es entender cuáles son las problemáticas que tiene la Argentina en su proceso de desarrollo, para transformar su estructura productiva”, para que de esta forma, de acuerdo a su análisis, “el país tenga mayor capacidad de repago de los compromisos que tome a nivel internacional”.
“Lo centrar es tener en cuenta que las tasas no sean usurarias a las cuales Argentina negocia para que ingresen capitales por la vía financiera, y que esos capitales sirvan para mejorar el entramado productivo”, reflexionó el economista, y concluyó: “Así se mejora el nivel de empleo, la distribución del ingreso, y de esa forma, pagar las deudas, en condiciones aceptables y razonables”.