El escándalo por la entrega de los alimentos incautados sigue. El lunes pasado, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo que el Gobierno sólo repartiría la comida que esté a punto de vencerse, pese a la orden judicial que lo obliga a entregarla. 

En medio de ello, surgió la denuncia contra el Ministerio de Capital Humano que tiene a la ministra Sandra Pettovello en la cuerda floja, aunque hasta el periodismo militante pretenda salvarla.  

Luego, el Gobierno cedió pero instó a la Fundación Conin a repartir los alimentos. Pero también hay problemas con el organismo. Este martes, Soledad Corbalán, responsable del comedor Carita Feliz de Tucumán, denunció: "Lo de CONIN es una falta de respeto, nos acercamos a pedir alimentos y pidieron fotos de los niños con la comida", 

“También nos pidieron los chats del comedor para ver si es verdad que funciona un merendero”, se indignó. Y agregó: "Pidieron fotocopias de los DNI de los nenes. Y no hay que exponer a los niños de esa forma”.