El mundo es redondo
Eran los días de plomo. Como decía Mario Benedetti: “Si cada hora viene con su muerte/si el tiempo es una cueva de ladrones/los aires ya no son los buenos aires/ la vida es nada más que un blanco móvil”. En cambio, para el gobernador de la Provincia de Buenos Aires Ibérico Saint Jean, él ejecutaba en prosa lo que Benedetti denunciaba en verso, afirmando brutalmente: "Primero mataremos a todos los subversivos, luego mataremos a sus colaboradores, después a sus simpatizantes, enseguida a aquellos que permanecen indiferentes y, finalmente, mataremos a los tímidos".
Como fiscal de la Provincia de Buenos Aires se desempeñaba por entonces Alberto Rodríguez Varela. Fue el que dio la orden de detención de Jacobo Timerman el 15 de abril de 1977 para que la ejecutara, a las tres de la mañana, la patota de Ramón Juan Alberto Camps y Miguel Echecolatz, en lo que se conoció como “El caso Graiver”. El periodista fue el fundador de tres emprendimientos periodísticos emblemáticos: “Primera Plana”, luego “Confirmado” en la década del sesenta y actuó desde el primero de los medios apoyado por el sector azul del ejército, a promover el golpe militar; y desde el segundo, con intereses petroleros detrás, a propulsar el golpe de Onganía contra Arturo Umberto Illía. En la década del 70 fundó el mítico diario “La Opinión”, que significó una notable innovación y propició el golpe que derrocó a Isabel Martínez.
Cuenta Timerman en su libro “Preso sin nombre, Celda sin número, que fue llevado al cine: “Me sacan la venda de los ojos. Estoy en un amplio despacho, tenuemente iluminado; escritorio, sillones. El coronel Ramón J. Camps, jefe de policía de la provincia de Buenos Aires, me está observando. Ordena que me liberen los brazos que tengo esposados por la espalda. Les lleva un tiempo porque han perdido las llaves. O quizás sólo fueron unos minutos. Ordena que me den agua. – Timerman-me dice- de lo que usted conteste a mis preguntas depende su vida. - ¿Sin juicio previo, Coronel? – Su vida depende de lo que conteste. - ¿Quién ordenó el arresto? – Usted es un prisionero del Primer Cuerpo en Ejército en operaciones.
Jacobo Timerman fue ferozmente torturado en los campos de concentración de Coti Martínez y Puesto Vasco. Fue acusado de ser socio de Montoneros a través del capitalista del diario La Opinión, el banquero David Graiver, quien había muerto en un accidente de aviación el 7 de agosto de 1976.
La presión internacional permitió rescatarlo a Timerman y pasó a prisión domiciliaria. Cuando la Corte Suprema de Justicia de la Nación dio la orden de permitir su salida del país, en 1979, el genocida cordobés Luciano Benjamín Menéndez intentó impedirlo. Timerman igual que José Ber Gelbard, los dos judíos inmigrantes, fue privado de la ciudadanía argentina. El presidente Raul Ricardo Alfonsín le devolvió personalmente su condición de argentino.
Jacobo Timerman denuncio a la DAIA y a la AMIA por su complicidad con la dictadura.
En el libro de Camps, “Caso Timerman, punto final” cuenta que en la ‘investigación’ del caso Timerman había participado ‘un equipo de integrantes del gobierno provincial’, y agradeció a Rodríguez Varela por su colaboración.
Muchos años después y durante el gobierno de Cristina Fernández en el juicio sobre Papel Prensa, Isidoro Graiver, hermano del banquero David Graiver, contó un episodio que vivió mientras estaba detenido en Puesto Vasco. Los represores lo llevaron con los ojos vendados a una oficina del centro clandestino de detención en la que estaba Camps. “Sáquese la venda, soy el coronel Camps”, se presentó el jefe de policía. Al lado de él había un civil que Graiver reconoció como Rodríguez Varela.
Alberto Rodriguez Varela fue Ministro de Justicia de Jorge Rafael Videla y defensor del dictador en la causa por robo de bebés, en la que intentó que el expediente fuera cerrado con el argumento de la cosa juzgada.
Fue rector de la Universidad de Buenos Aires y por esas ironías de la historia designado el 28 de diciembre de 1982, el día de los inocentes. Autor de una considerable cantidad de libros, uno de ellos es “La persona antes de nacer”. Su hija Mariana es una militante antiabortista que realizó una campaña proponiendo poner muñecos de bebitos en los balcones durante el mes de marzo, teniendo en cuenta que Carlos Menem instituyó el 25 de marzo, el día del niño por nacer.
El mundo es redondo. Pasaron varias décadas y el juez Claudio Bonadio, en democracia, pide una serie de detenciones, a la madrugada como en los viejos tiempos, por el caso del “Memorándum de entendimiento con Irán” entre los que se encuentra Héctor Timerman, Canciller de Cristina Fernández, afectado de un cáncer terminal y por lo cual se determinó arresto domiciliario.
Héctor Timerman denunció la complicidad con el macrismo de la dirigencia de DAIA y AMIA.
El mundo es redondo. El que firma la orden de detención es Enrique Rodríguez Varela, hijo de Alberto Rodriguez Varela, secretario del juez Claudio Bonadío.
El escritor uruguayo Eduardo Galeano escribió: “Los científicos dicen que estamos hechos de átomos, pero a mí un pajarito me contó que estamos hechos de historias.”
La historia de nuestro país está hecha de historias como estas.
Es sabido y a riesgo de ser obvio, el mundo es redondo e injusto.