Suicidal Tendencies explotó Flores con un show para la historia
Una locura total. Así podemos describir lo que fue la actuación de Suicidal Tendencies en el Teatro de Flores, que cerró con decenas de fanáticos sobre el escenario y el guitarrista, Ben Weinman, caminando sobre la gente. ¡Un show demencial! Reviví los mejores momentos en esta cobertura de DR.
Al entrar la atmósfera ya era de expectativa, y varios minutos antes de la salida de la banda, el Teatro de Flores estaba completamente explotado. Era de esas noches que se veían venir como épicas y con mucho calor.
Casi de manera puntual al horario estipulado, la banda de hardcore y crossover, salió a escena con los inconfundibles acordes de 'You Can't Bring Me Down'. Esa guitarra melódica empezó a sonar y los gritos se empezaron a escuchar.
Hasta que en un momento, Mike Muir, salió a escena y espero el momento de mayor efervescencia para gritar: “What the hell's going on around here?”, y ahí fue donde todo explotó.
Resulta increíble que el vocalista con nada más y nada menos que 61 años de edad siga moviéndose y corriendo por todo el escenario como si tuviera 20. Esa esencia electrizante de la banda se vio durante todo el show y sigue latente desde hace tantos años.
Luego de ese arranque increíble, siguieron uno tras otro temas completamente ‘al palo’ como War Inside my Head y Possessed to Skate. Cabe resaltar que en el bajo se encontraba el hijo del mismísimo ex bajista de la banda y actual Metallica, Robert Trujillo, en este caso Tye; quien hizo honor a su apellido.
Así siguieron los temas noventosos como Fascist Pig, y el público retribuía a cada salto de los integrantes de la banda, hasta que llegó uno de los mayores clásicos, Send me my Money.
Párrafo aparte para el baterista, Jay Weinberg, ex Slipknot; que mostró por qué estuvo tantos años en la banda de Corey Taylor. Un batero excepcional, con un golpe perfecto, con groove y una velocidad propia de un batero de primer nivel.
Otro momento memorable fue cuando el guitarrista, Ben Weinman, comenzó a trepar por entre la gente. Sí, se agarró de una estructura por fuera del escenario y comenzó a hacer una especie de skate humano, mientras tocaba la guitarra: realmente increíble.
Pero lo más loco vendría al final del show, con el clásico que hace gritar a todos “¡ST!”. Claro, estamos hablando de How Will I Laugh Tomorrow y Pledge Your Alliance.
Muir empezó a hacer subir a algunas chicas al escenario. Pero de repente lo que eran algunas jovencitas comenzó a convertirse en una horda de metaleros trepándose al escenario de Suicidal.
Ya para ese momento, Weinman estaba sobre un amplificador, sostenido por uno de sus asistentes para que no se fuera al demonio. Mientras tanto, el escenario se llenaba de toda especie de punk y metalero que no podía creer estar al lado de la banda.
Así terminó el show, con la gente como principal protagonista y con la banda casi perdida entre una multitud, desde los más jóvenes hasta los más añejos de las primeras épocas.