Si Frank Sinatra viviera... hubiese pasado por la calle Corrientes
La orquesta Count Basie se presentó en Buenos Aires, en una noche bien porteña, para mostrar 81 años del jazz más puro en poco más de dos horas de show. Si bien el Gran Rex no estuvo a tope, varias generaciones se acercaron para disfrutar de estos monstruos musicales. Seguramente, las almas de Frank Sinatra, Ella Fitzgerald, Sarah Vaughan, Tony Bennett y tantos más, estuvieron presentes.
El jazz es un universo único, en realidad, es el comienzo de casi todo lo que conocemos como rock, blues, y tantos otros estilos que se desarrollan hoy en día. Al fin y al cabo, es la raíz de todo y en la noche del miércoles, pudimos comprender mucho más de dónde venimos para saber a dónde vamos.
A pesar del frío y de la mitad de la semana, nos acercamos al Gran Rex para disfrutar de esta gran orquesta, sino, la más grande de la historia del jazz y el swing. Una de las pocas que ha tocado para reyes, presidentes y que ha servido de 'backin band' para cantantes de la talla de Frank Sinatra.
La orquesta está cumpliendo su 80 aniversario y así lo manifestó el trompetista William 'Scotty' Barnhart, actual director de la Count Basie, con un papel que lo hacía hablar un trabado y gracioso español.
Pudimos ver en el show a varias generaciones juntas de padre-hijo, abuelo-nieto, tío-sobrino, que hacía una mezcla extraordinaria y no muy frecuente en los recitales a los que estamos acostumbrados a asistir. Pero también se vieron algunos famosos infiltrados como el excantante de los Ratones Paranoicos, Juanse, el extrombonista del Natty Combo, Luca Ferrelli, la periodista Fanny Mandelbaum, entre otros.
El show comenzó apenas pasaditas las 21, bien puntual, hasta las 22 cuando se retiraron del escenario para hacer un 'impasse'. Durante esa hora tocaron varios clásicos y se destacaron las actuaciones de los caños líderes y, sobre todo, del baterista que según afirmó Barnhart "es el miembro más nuevo de la orquesta", Ray Nelson II.
Luego de una media hora de luces prendidas y charla extendida, y cuando ya nos poníamos impacientes con ganas de más, los músicos volvieron al escenario. Durante la noche sonaron clásicos de la talla de 'Moten Swing', '920 Special', 'Blues In Hoss Flat', 'April In Paris', 'Li'l Darlin', 'Basie Land', 'Whirlybirds', poniéndonos en un túnel del tiempo desde los comienzos de los años 30 hasta la época más moderna.
En su formación, la Count Basie todavía cuenta con varios músicos que fueron contratados por el histórico compositor de jazz y fundador de la big band, William James Basie, durante los años 80 en su mayoría. Sobre todo, mantiene su calidad conceptual a 'rajatabla', y dejaron boquiabiertos a más de uno en el reconocido teatro de la calle Corrientes.
En más de dos horas de show, la Count Basie nos dio una verdadera clase de música. Nos trasladó a todas las épocas del jazz, nos dejó ver que el rock es la venganza de los guitarristas, que lo que tenemos en nuestro inconsciente colectivo como 'estandarizado' no es tan así y que vale la pena ir a las raíces para conocer la historia completa de la música. Sin duda, esta palabra que define a los sonidos que nos llenan el alma, está en parte compuesta por estos norteamericanos.