Los Guns N’ Roses ya habían mostrado su disconformidad con el nuevo presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y sobretodo Axl Rose, quien a través de su cuenta de Twitter lo atacó en reiteradas oportunidades por sus comentarios misóginos y racistas.

Tan es así que, en su paso por México, los californianos colgaron una piñata de Trump e invitaron a subir a algunos fans al escenario para que se descarguen y le peguen con un bate de béisbol. Mientras tanto comenzó a sonar ‘Civil War’, haciendo referencia al “miedo que está alimentando Donald Trump”.