Al punk lo mató la Reina: el día que prendieron fuego a Londres
Joe Corré, hijo del conocido manager de los Sex Pistols, incendió el catálogo de objetos de la banda que heredó de Malcolm McLaren, valuado en seis millones de dólares. En protesta por que la ciudad de Londres declaró al 2016 como "el año del punk" con el visto bueno de la Reina Isabel II. Si, la que 40 años antes los había metido presos y censurado en su propio país.
El punk siempre a tratado de romper con los parámetros que nos obligan a respetar. Desde lo musical, hasta lo cultural. Nació en los suburbios, dentro de la masa obrera en forma de protesta contra el capitalismo que los consumía.
En una Inglaterra en los años 70' que era consumida por las monarquías y una juventud que no encontraba un futuro prometedor, de esa necesidad imperiosa de escupir, patear y gritar lo que estaba dentro de uno, nace Sex Pistols.
Sex Pistols lo terminó de consumir el capitalismo. Más allá de lo que generó con su primer disco "Never Mind the Bollocks" y el tema más conocido "God save the Queen", que incluso sufrieron censura y la imposibilidad de lanzar el disco de la manera que hoy cualquiera lo haría, los muchachos de los suburbios idearon la posibilidad de unir su canto de protesta contra el parlamento con el jubileo de plata de la Reina Isabel II (25 años).
Así fue que la banda navegó en un pequeño barco por el Támesis, el Westminster y el parlamento británico, y no sólo tocaron “God Save the Queen”, si no que lanzaron todo tipo de insultos hacía la figura de la reina a lo largo de todo el recorrido.
Todo esto resultó un desastre: rápidamente lanchas de la policía rodearon el bote de la banda y los obligaron a ir a puerto lo más rápido posible, allí no sólo arrestaron a los Pistols, sino a varios miembros del equipo, entre ellos su manager: Malcolm McLaren, quien fue el autor intelectual del plan.
Ahora, el hijo de quien ideó y estuvo siempre detrás de la banda pone en escena otra vez esta situación y la cuestiona. Y lo hace de la mejor manera: en el río Tamesis y prendiendo fuego todo.
Joe Marré, decidió quemar públicamente su colección de memorabilia punk, valuada en más de seis millones de euros. Pero también la pensó, como tal primogénito de McLaren, lo hizo en el 40 aniversario de "Anarchy in the UK".
Corré contó que lo que hace es un acto de protesta por el modo en el que el legado del punk ha sido adoptado por el mainstream o cultura de masas.
"Que la Reina bendiga el año del punk, es la cosa más aterradora que he oído nunca. Es un maldito ejemplo de que la cultura punk y alternativa está siendo apropiada por el mainstream. Más que un movimiento de cambio, el punk se ha convertido en una especie de pieza de museo o acto de tributo", ha dicho Corré en el comunicado.
"El punk ni ha sido, ni ha buscado ser nostálgico", dijo Corré dirigiéndose a unas 100 personas que esperaban a orillas del Támesis, en el barrio de Chelsea, en Londres.
Este 2016 ha sido considerado el año del punk y la ciudad de Londres ha creado varios eventos para celebrarlo. Corré ha denunciado en un comunicado que el programa ha sido respaldado por la Reina de Inglaterra y por diversos organismos oficiales y eso se aleja del espíritu del punk.
Corré prendió fuego unos muñecos que representaban al ex primer ministro David Cameron y a la premier británica Theresa May, mientras una banda sonaba en vivo y lanzaba consignas anti capitalistas. "Esta es una época en la que podés comprar 'punky nuggets' en McDonald's, una tarjeta de crédito de 'Anarchy in the UK' con una tasa del 19% anual, seguros de autos punk rock y pantalones sado de Louis Vuitton. Londres está siendo limpiada socialmente y convertida en un parque de diversiones para corporaciones, cadenas de tiendas y especuladores que no pagan sus impuestos", protestó Corré.
La manera de protesta y de hacer un llamado de atención tuvo sus pros y sus contras. De cualquier manera, el punk va más allá de romper todo y tocar malos acordes. Es el deseo de gritar desaforadamente que tenemos hambre y que el futuro es una mierda.