Se volvió adicta a los tatuajes a los 49 años tras pasar por una crisis
El divorcio con su marido llevó a la mujer a pasar por una crisis de la mediana edad, y a su vez, a cubrirse con tinta el 80 por ciento de su cuerpo. Su gran problema hoy en día, es que no puede conseguir a un hombre porque su apariencia los asusta.
Amanda Brignall, proveniente de Beverley, en Yorkshire, al noreste de Inglaterra, cubrió su cuerpo de tatuajes luego de pasar por una crisis de la mediana edad.
A poco tiempo de separarse de su marido, Amanda se cubrió el 80 por ciento de su cuerpo con tinta. Pero ahora, a los 49 años, le cuesta mucho conseguir pareja porque a los hombres les intimida su apariencia.
De todas maneras, la mujer no se arrepiente de sus tatuajes, pero no a todo el mundo les gusta tanto como a ella. En su barrio la conocen como "El Monstruo de Beverley", y hace siete años que no logra conseguir una cita. "Yo amo mis tatuajes, pero los hombres no parecen sentir lo mismo", señaló.