"Todo fue tan rápido que no entendí lo que pasaba en ese momento", relató a los medios locales, Zheng Lang, el muchacho que sufrió el accidente que le dejó una impresionante cicatriz en su cara.

Como se ve en las imágenes, la sierra le cortó parte del cráneo, pero no tocó áreas sensibles, así como tampoco el ojo. Los médicos que lo atendieron creen que sólo la fortuna es la que impidió que su herida sea de más gravedad. A tal punto que aseguraron que se recuperará en pocos días.