La primavera japonesa le rinde tributo al "pene de acero"
En la ciudad de Kawasaki, cada primavera se venera al "pene de acero", como símbolo de la fertilidad, la sexualidad y la protección contra enfermedades.
Mientras en este lado del mundo las hojas se caen de los árboles, en Asia el inicio de la primavera le da la bienvenida a un peculiar y tradicional festival.
En la ciudad de Kawasaki, en Japón, el "Kanamara Matsuri" (en español festival del "falo de metal") celebra la fertilidad, la sexualidad sin tapujos y la protección contra las enfermedades de transmisión sexual.
Las figuras de pene gigantes se llevan toda la atención durante todo el festival, y se pueden apreciar en forma de ilustraciones, dulces, decoraciones y hasta vegetales esculpidos.
Las celebraciones del festival tienen lugar alrededor de un templo local, el cual en el pasado era popular entre prostitutas que rezaban para pedir protección ante enfermedades de transmisión sexual.
Una antigua leyenda habla sobre un demonio con dientes afilados que se escondía en el interior de la vagina de una mujer joven.
Durante las noches de boda con la joven, el demonio castró a dos hombres, por lo que un herrero diseñó un pene de metal para romper los dientes del demonio. Con motivo de esta leyenda se venera ahora un falo de metal.