El doctor Harald Voss asegura que entre una y dos personas por cada millón de residentes en Alemania mueren durante la masturbación extrema que implica  técnicas peligrosas para aumentar la satisfacción durante el orgasmo.

La asfixia autoerótica está considerada como la causa más extendida de masturbación letal, así como el electrochoque, aunque es difícil obtener estadísticas precisas de este tipo de muertes, explica Voss, ya que todas rozan el tabú. 

"El número de casos no denunciados es extremadamente alto, por lo que es un caso raro en la medicina forense", dijo Voss a Bild, quien personalmente vio solo cinco casos de este tipo a lo largo de sus 30 años de trayectoria profesional, aunque remarcó que muchas veces los familiares que descubren que sus seres queridos murieron en circunstancias embarazosas suelen borrar las pruebas. 

Los riesgos asociados a la autoasfixia suelen subestimarse, a pesar de que con ella se pierde la conciencia más rápido de lo que la gente piensa. "Si se presionan ambas arterias carótidas, por ejemplo, lleva 30 segundos como máximo", precisó Voss.

El médico de 59 años contó que las masturbaciones arriesgadas son practicadas por personas de todas las edades, pero detalla que la mayoría de las víctimas son hombres, dado que las mujeres tienden a ser "más cautelosas" con los juegos autoeróticos.