Japoneses se despiden de sus muñecas sexuales realizándoles un funeral
En Japón estas muñecas son vistas por algunos como algo más que un objeto y hasta las consideran compañeras de vida. Por eso a una fotógrafa se le ocurrió organizarles funerales a la hora de despedirlas y, claro, reemplazarlas por una nueva.
El negocio detrás del negocio. En Japón muchos hombres solos deciden "compartir" su vida con una muñeca sexual.
Pero con el uso llega el momento de reemplazarla por una nueva y a una fotógrafa nipona se le ocurrió que era una falta de respeto simplemente descartar a las muñecas y se le ocurrió la idea de organizarles un funeral
A la ceremonia asisten, además del dueño de la muñeca, algunos allegados y amigos que la despiden como si se tratara de un familiar.
Obviamente el funeral tiene un costo y la producción fotográfica del mismo encarece su precio, pero el momento de despedir a la "compañera" queda plasmado para el recuerdo.