Cualquiera que alguna vez haya sido arrastrado a un centro comercial en contra de su voluntad, puede identificarse con estos hombres que esperan aburridos a sus parejas o a familiares con todas las bolsas de las compras.


Muchos de ellos se dirigen directamente al sillón cada vez que entran a un local, donde algunos se quedan dormidos y otros se llevan un diario para pasar el rato, sabiendo que se iban a encontrar en esa situación.


Una cuenta de la red social Instragram llamada "miserable_men" -"hombres miserables"- se encargó de reunir todas las imágenes de los sufridos hombres como muestra de apoyo y también para animar a otros usuarios a que suban sus propias fotos.