Timothy Robernhorst se enojó mucho al descubrir la faceta de abusón de su hijo, por lo que decidió imponerle un particular castigo, que muchos calificaron de ejemplar

Y es que el hombre obligó a su hijo a escribir un enorme letrero con la siguiente leyenda: "Mi nombre es Kayden Robenhorst, soy culpable de ser un abusón en la Escuela Media Puiaski –Estados Unidos-. Mi castigo es el siguiente: 50 flexiones con los puños, 50 flexiones inclinadas, correr durante un kilómetro a las 4.30 de la mañana y disculparme con el chico del que abusé en la escuela delante de toda la clase".

Más allá del castigo, el padre aclaró que no quiere que ataquen a su hijo, pero que por favor todo el mundo comparta la imagen en las redes sociales para luchar contra el bullying.