Tras la muerte de otro bombero en la localidad chilena de Ñiquén, en la región del Biobío, ya son 10 las víctimas fatales productos de los incendios que mantienen en alerta al país trasandino. 

El voluntario muerto fue  identificado como Juan Eduardo Bizama y perdió la vida cuando el camión aljibe en que se hallaba volcó en la ruta al tener que maniobrar producto de la caída de un árbol en la zona de incendios. 

La muerte del voluntario  se suma a la del bombero Hernán Avilés que falleció este miércoles en el sector de Santa Olga, cuando quedó atrapado en una alambrada que se prendía fuego tras ayudar a la evacuación de una familia.

Además fallecieron dos personas de sexo masculino, que no han sido identificadas, tres brigadistas de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), un agricultor y dos carabineros.

Los intensos focos de fuego que se desencadenaron en Chile hace varios días son combatidos por diversos medios, entre ellos 46 aeronaves y cerca de 4.000 efectivos terrestres, incluidos bomberos, brigadas de la Conaf, militares y policías junto a los lugareños que intentan salvar lo que poco que les queda. 

La Conaf informó que tienen lugar un total de 103 incendios forestales, de los que 53 estan en fase de combate, 48 bajo control y dos han sido extinguidos, con una superficie afectada de 273.533,7 hectáreas.