Ocurrió en un vuelo de US Airways, donde un hombre de 54 años bromeó asegurando que tenía ébola luego de estornudar. A partir de este comentario, un grupo de médicos ingresó al avión con trajes herméticos para comprobar si lo que decía el hombre era cierto.


Tras una inspección, se determinó que el hombre no tenía ébola y que tampoco había estado en África, como también afirmó dentro del avión.


Aunque se determinó que todo se trató de una falsa alarma, el sujeto fue enviado de regreso a Estados Unidos, en donde se le harán más análisis.


Tras dos horas de espera dentro del avión, los pasajeros finalmente pudieron emprender el viaje.