Un dron estadounidense mató a siete supuestos insurgentes
Al menos siete supuestos insurgentes murieron y otros tres resultaron heridos por el bombardeo de un dron estadounidense contra una vivienda en la región tribal de Waziristán del Norte. Desde 2004, estos aviones espía ya mataron miles de personas en Pakistán.
El ataque, que es el cuarto de este tipo desde el mes pasado, ocurrió en la zona de Datta Khel alrededor de las 11 (22, hora en Argentina), cuando el avión espía lanzó dos misiles contra una casa.
Según dijo el miembro de la Administración local de Waziristán del Norte, Ajmal Ali Khan, citado por EFE, cuatro de los supuestos insurgentes eran de nacionalidad uzbeka y afgana.
Tras medio año de interrupción en sus actividades en Pakistán, los drones estadounidenses volvieron a operar en el cinturón tribal de Pakistán.
Tras llegar a su pico de actividad en 2010, los drones estadounidenses efectuaron el año pasado una treintena de bombardeos en Pakistán y mataron cerca de 150 personas.
La organización estadounidense New America Foundation, los ataques con drones en Pakistán causaron desde 2004 entre 2.000 y 3.500 muertos, un diez por ciento de los cuales eran civiles.