Toma de rehenes en Río de Janeiro terminó con el delincuente abatido por la policía

Durante varias horas de la madrugada este ómnibus estuvo parado en el puente que une a Río con Niteroi, por una toma de rehenes perpetrada por un delincuente. 

Al parecer, el hombre estaba cargado con bidones de nafta y amenazaba con prender fuego el micro y a sus pasajeros. Además portaba armas y bombas molotov.

Agentes de la Policía Militar de Brasil rodearon el micro y cerraron la zona, mientras las fuerzas especiales del Bope llegaron al lugar. 

En una entrevista con Good Morning Rio, el portavoz de la policía militar, el coronel Fliess, informó que el bandido llevaba una pistola de juguete.

Después de haber liberado a 3 rehenes, el secuestrador se baja del micro apuntando a la cabeza de un rehén, pero un francotirador de la policía lo mata de un tiro y, por suerte, nadie salió herido salvo el maleante. 

Río quedó marcada tras el histórico secuestro en el bus 174, en el que murió el secuestrador y una rehén. 

De hecho, se hicieron películas sobre aquel suceso que marcó a toda la sociedad carioca.