México reconoce de manera oficial que la 'guerra contra el narco' dejó 40 mil desaparecidos
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció un nuevo programa para trabajar en el hallazgo de cuerpos, identidades y personas vivas que hasta el momento componen una triste lista de desaparecidos. Lo que dejó la guerra contra el narco, lanzada hace más de 20 años por Felipe Calderón y continuada por Enrique Peña Nieto.
La cifra nos toca de cerca a los argentinos. Desde 2006, con la asunción de Felipe Calderón como presidente de México, la declaración de la guerra contra el narco no hizo más que sembrar el terror y la muerte: son más de 20 años de ocultamiento, donde organizaciones sociales casi sin apoyo oficial se han organizado tanto en la búsqueda como en la denuncia por los miles de jóvenes secuestrados por los cárteles, muertos inocentes durante enfrentamientos en las calles o incluso muchos que abandonaron el país y nunca más se supo de ellos.
Con el anuncio del nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador, México dejó atrás el ocultamiento de la peor política policial y reconoció en voz del flamante subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, unas 40 mil personas desparecidas: "México es una enorme fosa clandestina", advirtió dando a conocer además la existencia de "26 mil cadáveres sin identificar en los institutos forenses".
"Esto es el resultado de una política fracasada, inhumana, corrupta y de saqueo. Nunca se había ahondado tanto la desigualdad en México como en el periodo neoliberal", afirmó el Presidente en su habitual conferencia diaria luego de que días atrás diera por terminada la política de la captura de capos narcos.
La corresponsal mexicana en Argentina Cecilia González compartió datos de investigaciones humanitarias y advirtió que las 1200 fozas reconocidas por Encinas, en realidad serían bastante más: "Una tragedia poco contada porque la narrativa a escala global elige a buenos y malos de cada época. Y Felipe Calderón y Peña Nieto eran amigos del status quo, por eso no los criticaron a pesar de la tragedia humanitaria que provocaron", explicó en un impecable hilo de tuits.
El primer paso para trabajar por cambiar la triste tragedia humanitaria es reconocerla, y el gobierno de López Obrador anunció un plan ambicioso. Para dar vuelta la página de un presupuesto de 468 millones aplicado apenas en poco más del 1% y la casi nula ejecución de las leyes -apenas 8 de los 32 estados conformaron las Comisiones de Búsqueda- Encinas detalló el nuevo Sistema Nacional de Búsqueda que comenzará a trabajar en marzo.
El Instituto Nacional de Identificación Forense dará prioridad a la búsqueda de víctimas de trata con vida y prestará atención especial a migrantes que de acuerdo a los datos expuestos, se estima son entre el 8 y 10% de las personas desaparecidas. Los especialistas del equipo de Antropología Forense de la Argentina -quienes aquí cesaron sus trabajos humanitarios a raíz de la falta de pagos del Gobierno- también participarán de los trabajos encargados por el ejecutivo.
"Nunca mas una guerra para combatir delitos que nos lleven a esta situación de tragedia nacional y violación de los derechos humanos a la que nos han llevado", concluyó Encinas en su discurso con el claro objetivo de "pacificar" México, en una clara diferenciación de las estrategias militaristas que comenzaron por el presdiente Felipe Calderón y siguió Enrique Peña Nieto.