El largo y sinuoso camino del Brexit que implicaría renegociar más de 700 tratados internacionales
Desde que Theresa May asumió las responsabilidades como Primera Ministra sabía que se enfrentaba a un tenso proceso para lograr la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE). Pero podría ser mucho más complicado de lo que se imaginó desde un comienzo.
De acuerdo a la investigación publicada por el diario británico Financial Times (FT), con la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE)- proceso que se popularizó bajo el nombre de "brexit"- se tendrán que renegociar al menos unos 759 tratados internacionales.
Además de las negociaciones bilaterales entre Londres con Bruselas (UE) para lograr que sea "lo menos doloroso y costoso posible", el gobierno británico también se verá obligado a rediseñar sus relaciones y acuerdos en un nuevo mundo donde el viejo continente ya no lo sostiene política y económicamente.
Londres se enfrenta a los acuerdos previos con 168 países cuando era parte de la UE y cuyas condiciones han cambiado con el proceso de salida.
Entre los tratados internacionales a revisar hay 295 acuerdos bilaterales y multilaterales de comercio, así como 202 textos de regulación compartida que abarcan desde normativa antimonopolio hasta políticas de intercambio de datos, según aseguró el diario económico británico.
Y agregó que también requieren atención 69 acuerdos pesqueros, que establecerán el acceso a determinadas aguas y cuotas de capturas, 65 pactos de transporte, en su mayoría en relación a la aviación, 49 acuerdos aduaneros, 45 en el sector de la energía nuclear y 34 relacionados con la agricultura.
"El precedente más cercano en el que se puede pensar es la suspensión de un país. Se va a empezar prácticamente de cero. Será un proceso difícil y repetitivo", subrayó el exabogado del gobierno británico Andrew Hood, en diálogo con el FT.
Además, el ministro británico de Comercio Internacional, Liam Fox, ha sostenido por su parte que el Gobierno prevé negociar acuerdos de transición para que las negociaciones de nuevos tratados internacionales no provoquen "ninguna disrupción" en el Reino Unido.
Fuente: Télam