Este miércoles un tren que iba de Málaga a Sevilla (al sur de España), sufrió un accidente debido a las fuertes lluvias. El servicio había estado frenado durante la mañana y fue reabierta poco antes de que se produjera el descarrilamiento en Sevilla. 

El convoy iba de Málaga a la capital andaluza y se salió de la vía el tercer vagón a su paso por la localidad sevillana de Arahal, y según fuentes cercanas al lugar informaron que los pasajeros fueron trasladados a otra zona ya que el convoy sufrió la rotura de todos los depósitos de combustible, por lo que existía riesgo de explosión. 

Un helicóptero de emergencias se acercó al lugar del siniestro para atender a los pasajeros lastimados. Se estima que hay al rededor de 30 heridos. Hay una persona con la cadera rota y otra con traumatismo craneoencefálico. 

Varias ambulancias se acercaron también a prestar sus servicios a los afectados por el descarrilamiento, pero no han podido acceder al lugar porque se encuentra totalmente embarrado por la lluvia.

Un testigo del suceso dijo al diario español ABC que los agricultores que trabajaban en la zona fueron los primeros en atender a los heridos, en espera de la llegada de los servicios de emergencia. 

El siniestro se ha registrado a cinco kilómetros de otra zona que fue reabierta al tráfico poco antes del suceso tras verse también anegada.