Acreedores europeos inician juicio a Euroclear y al Bank of New York
Bonistas europeos acudieron a sus abogados para destrabar el pago depositado por la Argentina en las entidades bancarias. Las leyes de Bélgica y Luxemburgo impiden la aplicación de las decisiones del juez Griesa a favor de los fondos buitre.
Varios bonistas europeos iniciaron acciones contra las entidades financieras que no procesaron los pagos que realizó la Argentina.
A través de un documento presentado al juez Thomas Griesa, el equipo legal de los acreedores advirtieron que tanto la ley belga como la de Luxemburgo hacen inaplicable el fallo restrictivo de la distribución del dinero.
"Los tenedores de bonos europeos iniciaron litigios en Bélgica contra Euroclear y el Bank of New York Mellon Bruselas para obtener una orden que confirme que los mandatos judiciales (emitidos en Estados Unidos) son inaplicables en ese territorio", planteó Christopher J. Clark, abogado de los bonistas.
Se trata de los siguiente fondos involucrados: Knighthead Capital Management, Redwood Capital Management, Perry Capital, VR Global Partners, Monarch Master Funding, Silver Point Capital, QVT Fund, Quintessence Fund, y Centerbridge Partners (cada uno en representación de sí mismo o de un grupo de fondos manejados o aconsejados por estos).
El texto cita como argumento que el parlamento belga aprobó en 2004 una ley que modifica la implementación de un acuerdo continental de 1999 para evitar una situación similar a la actual, pero con los bonos reestructurados en Nicaragua.
"El propósito de la ley belga es salvaguardar la liquidez de los mercados financieros, garantizando que las cuentas de liquidación de los acuerdos estén libres de obstrucciones", explicaron.
Por su parte el abogado del estudio Latham & Watkins señaló que la ley de Luxemburgo va en el mismo sentido y prohíbe los mandatos judiciales contra la distribución de los fondos por parte de Clearstream.
El artículo 15 de la Ley de Valores del país establece que no se puede forzar ningún movimiento con respecto a las cuentas atadas a los bonos protegidos por los acuerdos europeos.