¿Por qué Túnez se convirtió en el país más feminista del mundo árabe?
Una nota de la BBC muestra cómo viven estas mujeres musulmanas que tienen más libertad que el resto de sus correligionarias.
Las mujeres usan minifaldas, fuman en los cafés o toman una copa de vino en alguna discoteca de moda. Y eso que el 99% de sus poco más de 11 millones de habitantes son fieles musulmanes.
La lista incluye el derecho a divorciarse, a abortar, a votar y a postularse a cargos públicos, a crear empresas, a exigir salarios iguales a los de los hombres.
¿Cómo llegó este país enclavado en el norte de África, vecino de Argelia y de Libia, a convertirse en el país árabe con más derechos para las mujeres? La Primavera Árabe.
En 1956, cuando el país se independizó del mandato colonial de Francia, consiguió estos derechos que la mayoría de las musulmanas no tiene.
"Antes de la independencia, las mujeres se quedaban en casa, usaban el velo y, básicamente, no tenían derechos. Lo que disparó el cambio fue la alta tasa de acceso a la educación y la urbanización, y una importante clase media en la que los padres enviaban a sus hijas a estudiar", dijo Dora Mahfoud, profesora de Sociología de la Universidad de Túnez, al programa The Compass de la BBC.
Además de eso, las mujeres están escolarizadas y se debe a Habib Bourguiba, el primer presidente del país. Bourguiba promulgó el Código de Estatus Personal, una legislación radical en el mundo árabe, que prohibía la poligamia y les daba a las mujeres casi los mismos derechos que a los hombres, incluyendo el derecho a divorciarse y el derecho a la educación.
"Tan pronto como llegó al poder, empujó a los padres a enviar a sus hijas al colegio. Él pensó que convertirse en un impulsor de los derechos de las mujeres era algo bueno para la imagen de Túnez como un país moderno e independiente. Fue el inicio del feminismo tunecino promovido por el Estado", añadió.
Bourguiba se hizo famoso también porque en medio de ese impulso modernizador llegó a repudiar públicamente el uso del velo islámico, al que llamó "ese trapo odioso" del que pidió a las mujeres liberarse en 1956.
Después de la independencia, las mujeres en Túnez avanzaron más y más hasta la legalización del aborto se produjo ocho años antes que en los Estados Unidos.
"Durante la Primavera Árabe, Túnez destacó porque las mujeres protestaban al lado de los hombres y, una vez más, los derechos de las mujeres fueron de la mano con la lucha de todo el país por una mayor libertad", afirmó Mahfoud.
Además el país aprobó una nueva Constitución y unas nuevas normas en las que se establece que la mitad de los candidatos postulados por los partidos políticos a cargos parlamentarios deben ser mujeres.
"Muchos países no tiene mujeres en el Parlamento, pero la Ley Electoral en Túnez establece que las mujeres deben ocupar el 50% de las candidaturas de los partidos. Eso es impresionante y es algo que no ocurre, por ejemplo, en Reino Unido", dijo Henrietta Moore, directora del Instituto para la Prosperidad Global del University College de Londres.
Pero no todo es color de rosa. Pese a ser un país pionero en el mundo árabe en impulsar la igualdad de género, falta mucho. Un informe reciente del Ministerio de la Mujer y de la Familia indicó que 53% de las mujeres en Túnez sufre un ataque violento a lo largo de su vida.
"Hay mucho acoso hacia las mujeres. Hay una percepción determinada sobre el papel de las mujeres que existe en algunos sectores de la sociedad, en áreas rurales y en zonas pobres tanto en Túnez como en otros países árabes. Esa percepción procede de la cultura árabe-islámica", dijo Mansour-Ille.
"Si miramos al Islam, no es la religión, es la cultura la que establece el marco en el que se señala que deben operar las mujeres. La ley en Túnez vino a decir que las mujeres podían salirse de ese marco y que pueden ir más allá, pero si miras la sociedad, una parte de ella, aún no acepta eso. Creo que ese es el problema que hay allí", agregó.