La tecnología de a poco se va apoderando de más aspectos de la vida cotidiana. Esto es un hecho real y cada vez más recurrente, que se puede ver tranquilamente por la calle al observar a cualquier persona sumergida en su android o en su tablet, como si se aislara del mundo real. Un poco de esto, y otro poco de un raro romance es lo que trae “Ella” (Her), uno de los estrenos más importantes de la semana, y que estuvo presente en la temporada de premios de este año.
La cinta está contextualizada en un futuro no muy lejano y narra la historia de un solitario y triste hombre que trabaja como escritor de cartas de amor destinadas y firmadas para y por otras personas. En medio de una rutina en soledad, y frustrado por una ruptura amorosa bastante reciente, decide comprarse un sistema operativo de última tecnología, y una vez que éste es instalado conocerá la voz de una mujer, que sale directamente desde la computadora, que lo cautivará, y hasta comenzará una relación con ella.
El encargado de contar esta original historia es Spike Jonze, un director que se ha desempeñado mayormente en la industria de videos musicales, pero que ha incursionado en Hollywood, por ejemplo con el film “¿Quieres ser John Malkovich?”. Aquí logra una película muy interesante, que lleva a reflexionar sobre el verdadero uso de la tecnología, al tiempo que cautiva a través de las imágenes y del guión, recreando la solitaria vida del protagonista. Muy bien filmada, y gran uso de recursos como el flashback y los primeros planos, que en este tipo de largometrajes funcionan realmente bien.
Se puede decir que el protagonista principal es Joaquin Phoenix, aunque casi que comparte pantalla con la sensual voz de Scarlett Johansson. El actor suele brindar grandes interpretaciones, y en este caso no defrauda. Un trabajo para nada sencillo, donde pasa de ser un angustiado y antisocial hombre a un divertido aunque aturdido enamorado de un sistema operativo. Gran trabajo de primer actor de la cinta.
Por el lado femenino, para los espectadores será una desgracia que Scarlett solo aparezca con su voz, y no se pueda admirar su belleza en ningún momento. Sin embargo, hace un gran uso del guión y logra lucirse solo a través de sus diálogos con Phoenix.
Dentro del reparto, también está Amy Adams, aunque con menos participación. Si bien sus intervenciones son pocas, la actriz siempre se destaca y es muy interesante ver cómo logra adaptarse a cualquier tipo de papel, y siempre haciendo grandes trabajos.
La cinta es muy buena. Es excelente la forma que el director retrata lo que podría ser una problemática social actual, como es el aislamiento que produce la tecnología. Y también cómo esto se convierte en una rara e increíble relación amoroso, atravesando por todas sus fases. Todo está muy bien contado a partir de un ritmo fílmico justo, que hace que el público logre entretenerse y disfrutar de la historia.
¿Hay que verla? Hay que verla y obtener una interpretación propia. Como toda película original, algunos la amarán y otros la odiarán. Es un film diferente. No se trata de una cinta romántica clásica ni de casualidad, y sin embargo logra entretener y se disfruta. Es una buena propuesta para esta semana que merece ser vista, sin ninguna duda.

La tecnología de a poco se va apoderando de más aspectos de la vida cotidiana. Esto es un hecho real y cada vez más recurrente, que se puede ver tranquilamente por la calle al observar a cualquier persona sumergida en su android o en su tablet, como si se aislara del mundo real. Un poco de esto, y otro poco de un raro romance es lo que trae “Ella” (Her), uno de los estrenos más importantes de la semana, y que estuvo presente en la temporada de premios de este año.

La cinta está contextualizada en un futuro no muy lejano y narra la historia de un solitario y triste hombre que trabaja como escritor de cartas de amor destinadas y firmadas para y por otras personas. En medio de una rutina en soledad, y frustrado por una ruptura amorosa bastante reciente, decide comprarse un sistema operativo de última tecnología, y una vez que éste es instalado conocerá la voz de una mujer, que sale directamente desde la computadora, que lo cautivará, y hasta comenzará una relación con ella.

El encargado de contar esta original historia es Spike Jonze, un director que se ha desempeñado mayormente en la industria de videos musicales, pero que ha incursionado en Hollywood, por ejemplo con el film “¿Quieres ser John Malkovich?”. Aquí logra una película muy interesante, que lleva a reflexionar sobre el verdadero uso de la tecnología, al tiempo que cautiva a través de las imágenes y del guión, recreando la solitaria vida del protagonista. Muy bien filmada, y gran uso de recursos como el flashback y los primeros planos, que en este tipo de largometrajes funcionan realmente bien.

Se puede decir que el protagonista principal es Joaquin Phoenix, aunque casi que comparte pantalla con la sensual voz de Scarlett Johansson. El actor suele brindar grandes interpretaciones, y en este caso no defrauda. Un trabajo para nada sencillo, donde pasa de ser un angustiado y antisocial hombre a un divertido aunque aturdido enamorado de un sistema operativo. Gran trabajo de primer actor de la cinta.

Por el lado femenino, para los espectadores será una desgracia que Scarlett solo aparezca con su voz, y no se pueda admirar su belleza en ningún momento. Sin embargo, hace un gran uso del guión y logra lucirse solo a través de sus diálogos con Phoenix.

Dentro del reparto, también está Amy Adams, aunque con menos participación. Si bien sus intervenciones son pocas, la actriz siempre se destaca y es muy interesante ver cómo logra adaptarse a cualquier tipo de papel, y siempre haciendo grandes trabajos.

La cinta es muy buena. Es excelente la forma que el director retrata lo que podría ser una problemática social actual, como es el aislamiento que produce la tecnología. Y también cómo esto se convierte en una rara e increíble relación amorosa, atravesando por todas sus fases. Todo está muy bien contado a partir de un ritmo fílmico justo, que hace que el público logre entretenerse y disfrutar de la historia.

¿Hay que verla? Hay que verla y obtener una interpretación propia. Como toda película original, algunos la amarán y otros la odiarán. Es un film diferente. No se trata de una cinta romántica clásica ni de casualidad, y sin embargo logra entretener y se disfruta. Es una buena propuesta para esta semana que merece ser vista, sin ninguna duda.