Derrumbe del peso argentino: la moneda que más perdió en el mundo
Entre los países emergentes, el peso argentino fue el más afectado por la apreciación del dólar y, lógicamente, por las políticas recesivas y devaluatorias de Mauricio Macri.
Durante el finalizado 2018, el peso argentino se desplomó 50,6 por ciento frente al dólar norteamericano, convirtiéndose así en la moneda que más se devaluó en el mundo, casi duplicando a su inmediata seguidora, la lira tura.
En efecto, la moneda de Turquía se devaluó un 28 por ciento frente al dólar, mientras que el rublo ruso cayó 17,1 por ciento, el real brasileño perdió el 14,5 por ciento y el rand sudafricano sufrió una depreciación del 13,8 por ciento.
Según los especialistas, son dos los factores que llevaron en apenas un puñado de meses a semejante catástrofe económica: la revalorización del dólar a escala mundial y la impericia –por decirlo suavemente– del gobierno argentino en materia económica.
La tendencia alcista de las tasas de interés en Estados Unidos terminaron fortalecimiento al dólar, al mismo tiempo que Mauricio Macri efectuaba en la Argentina una devaluación histórica de la moneda, es decir de los ingresos populares.
Se trató de la mayor desvalorización inducida en 16 años, contando desde la salida de la convertibilidad en 2002, cuando se terminó con el 1 a 1 elucubrado por Domingo Felipe Cavallo.