Un muerto, heridos, detenidos y hechos vandálicos en el "Día del Hincha Xeneize"
Un muerto en la estación de Lanús, al menos 16 heridos, varios de ellos agentes de la Policía Federal, y treinta personas detenidas, fue el resultado de los violentos festejos por el llamado "Día Internacional del Hincha Xeneize", que reunió a unas 30 mil personas en la zona del Obelisco.
El año pasado comenzó esta costumbre de los hinchas 'xeneizes', quienes eligieron como fecha representativa el 12/12, en alusión al apodo de la hinchada, y se reunieron en pleno centro. Hubo miles de personas celebrando desde la tarde pero todo se opacó debido a que registraron algunos incidentes.
El día comenzó con mucha actividad en las redes sociales. En Twitter se hizo tendencia #FelizDiaDelHinchaXeneize y entrada la tarde llegó la masiva reunión en el Obelisco.
Otra vez, los hinchas de Boca cortaron las Avenidas 9 de Julio y Corrientes para armar su fiesta pero un grupo comenzó a arrojar distintos tipos de proyectiles, generando incidentes.
Sin la presencia de la Policía Metropolitana, los violentos atacaron una columna de agentes de la Federal que tomaba posición en el lugar para prevenir el desbande durante el horario de desconcentración de la jornada laboral.
Poco antes de producirse los disturbios iniciales, un grupo de hinchas trepó a semáforos y al techo de un local de comidas rápidas en lo que fue un anticipo de lo que sucedería más tarde.
Mientras los hinchas colgados bajaban a la calle y todavía llegaban micros repletos de "xeneizes", la Policía Federal recibió un violento ataque con piedrazos, botellas y otros elementos contundentes.
Como saldo, varios agentes lastimados fueron derivados al hospital Churruca y otros varios civiles terminaron heridos, informó el titular del SAME, Alberto Crescenti. Por ese episodio, tomó intervención el fiscal en lo contravencional Federico Díaz Villalba.
Posteriormente, la policía montó un vallado a lo largo de Corrientes hasta Callao para contener a los manifestantes y evitar el daño a los comercios.
Los teatros, librerías y los restaurantes de la tradicional arteria porteña bajaron rápidamente sus persianas, aunque cuatro de ellos, ubicados entre Talcahuano y Uruguay, terminaron con sus fachadas dañadas.
Además, un hincha fue asesinado después de los incidentes. Se trata de Rafael Ruiz, de 19 años, quien fue baleado en Lanús, cuando bajaba de una formación del Roca en la que volvía del centro porteño. Las primeras informaciones indican que al joven le dispararon desde una camioneta.
El presidente de Boca Daniel Angelici desligó la responsabilidad dirigencial por los hechos, al aclarar que "no fue un festejo organizado por esta dirigencia" sino convocado por las redes sociales.
"Tendría que haberse organizado con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y cortar un solo carril de la avenida 9 de Julio", consideró.
"Vamos a tomar medidas para que esto no ocurra más. El club no puede dejar esta imagen", dijo Angelici, quien sostuvo que "se puede hacer un festejo civilizado sin cortar todas las calles".
"Tenemos mucha pasión y por eso nos metemos en el fútbol. Pero esto no es Boca, esto es una locura", criticó el presidente "xeneize".