Talleres perdió 2-1 con Aldosivi en Mar del Plata. El cotejo, válido por la quinta fecha del Torneo de Primera División, se llevó a cabo en el estadio José María Minella.

El equipo que dirige Frank Darío Kudellka sigue sin ganar en el certamen y su última alegría fue el triunfo que le dio el ascenso a Primera, el 5 de junio ante All Boys, en Floresta. A Talleres se le abrió el arco tarde: a los 37 del segundo tiempo. Mereció empatar. Sebastián Penco marcó los dos goles del local, mientras que la "T" descontó a través de un tiro libre de Gil, a poco del final. El Matador tiene sólo dos puntos en la tabla (empates con Racing y Banfield; y derrotas ante Colón y River).

Una de las principales novedades en la "T" es que Matías Vuoso, por primera vez, participó en algunos minutos. En la próxima fecha, visitará a San Martín de San Juan. El partido Luego de un buen arranque por parte del local, Talleres había podido emparejar el trámite del partido. Sin embargo, en un avance vertiginoso del Tiburón, un tiro al arco fue interceptado por la mano de Gandolfi y el árbitro Ariel Penel no dudó: penal. Entonces, a los 9 de ese primer capítulo, Sebastián Penco puso el 1-0.

A partir de ese momento, el Albiazul logró un poco más de posesión, e incluso tuvo dos jugadas para nivelar: un tiro libre directo, que Nicolás Giménez no pudo ejecutar con precisión, y una corrida de Eial Strahman, que Matías Vega pudo contener. Al promediar la etapa inicial, Kudelka propuso algunas variantes posicionales, como por ejemplo, el cambio de banda entre Sebastian Palacios y Jonathan Menéndez.

Aunque luego ambos volvieron a su puesto del arranque. Sobre el final de la primera etapa, Talleres volvió a transformars en protagonista. De hecho, contó con numerosas ocasiones para nivelar. Primero fue una escapada de Leonardo Gil, en combinación con Nico Giménez, luego un anticipo de Carlos Quintana y, al final, un remate de Menéndez. Ninguna fue efectiva, por lo que el entretiempo llegó con el marcador 1-0 en favor del local.

Fuente: La Voz del Interior- Por Javier Flores, enviado especial a Mar del Plata