París Saint-Germain juega este viernes como visitante ante Brest, sin Leo Messi, que no fue convocado. Las autoridades francesas consideran al partido como "de alto riesgo" y prohibieron la indumentaria del conjunto parisino en los alrededores del estadio.

La decisión se tomó para evitar incidentes y se efectuó mediante la publicación de un decreto que, además, no permite el ingreso de hinchas parisinos al estadio para el encuentro de hoy, desde las 16 (hora de Argentina).

Otra demostración de que la violencia en el fútbol no sucede solo en Argentina.