Emma Morquecho, una jugadora de Voley trans y migrante, logró superar enormes desafíos en un contexto difícil: Vivir en Estados Unidos durante la presidencia de Donald Trump. Su historia es un testimonio de resiliencia ya que se tuvo que enfrentar a muchos prejuicios y barreras sociales.

Sin embargo, su pasión por el deporte la llevaron a romper con los esquemas actuales. A lo largo de su carrera, Emma utilizó su figura para promover los derechos de los migrantes y de las personas trans, demostrando que es posible triunfar hasta en las sociedades más conservadoras.

Quién es Emma Morquecho y cómo fue su desarrollo superador en el voley

Emma Morquecho, la deportista que marca un antes y depués en la historia del Voley

Emma Morquecho es una mujer trans, migrante de Chihuahua (México), de 32 años, que enfrenta una vida marcada por la discriminación y las políticas agresivas respaldadas por el mandatario Donald Trump.

Actualmente residente en Phoenix, Arizona, Emma, ​​quien es maestra y deportista, experimentó un profundo impacto, tanto en su vida laboral como en su pasión por el Voley: La creciente polarización y el discurso de odio contra las personas trans la llevaron a abandonar las competencias deportivas debido al rechazo y agresiones que recibió en más de una oportunidad.

Desde temprana edad, Emma enfrentó obstáculos derivados de la discriminación, lo que la llevó a estudiar y destacarse como profesora, investigadora y activista. Sus ganas de no quedarse quieta la llevaron a realizar una Maestría en Investigación Educativa, destacándose con el mejor promedio, y ahora cursa un Doctorado en Ciencias de la Administración

Su vida no fue fácil, desde los 16 años sufrió violencia por su identidad de género y, aunque practicó deportes como el atletismo, fútbol y natación, su verdadera pasión siempre fue el voleibol. A los 25 años, al comenzar su transición, perdió trabajo, amigos y familia; además de sufrir un grave ataque físico: Un transfemicidio fallido.

A pesar de todo esto, Emma sigue luchando por sus derechos y su pasión por el deporte. A lo largo de su carrera se enfrentó a diversos tipos de violencia. En 2020, mientras se preparaba para un mundial de Voley en Italia, la pandemia de COVID-19 canceló el evento. 

Jugó a nivel semiprofesional en México y EEUU, y ella sigue alzando su voz por la justicia, la igualdad y el amor. Para ella, la lucha continúa, siempre con la esperanza de que, a pesar de los obstáculos, la vida puede ofrecer felicidad. “Solo necesitamos amor”, afirma con firmeza.