Sorpresivamente, a horas de la final del Mundial de Clubes los medios españoles quisieron instalar que San Lorenzo es un equipo violento. La teoría tomó tal repercusión que el propio presidente Matías Lammens fue el primero en responder y desmentir las acusaciones. Pero este viernes dos referentes como Mario Alberto Yepes y Leandro Romagnoli tomaron el guante.

En la conferencia de prensa de esta jornada, en Marrakech, el defensor colombiano afirmó: "Es distinto nuestro fútbol al europeo, pero no veo que vayamos con intenciones de ensuciar. No sé de dónde salió eso, nosotros vamos a jugar nuestro partido".

En tanto, el zaguero comentó cómo es la manera en que se preparan para la final: "Tenemos mucha ilusión y el equipo está muy comprometido, sobre todo, por el hecho de poder disfrutar el jugar esta final. Ojalá podamos estar a la altura y con el orgullo de haberla jugado".

A su vez, el otro que se refirió a las acusaciones de juego brusco fue el ‘Pipi’ Romagnoli. "Nosotros vamos a salir a disputar a muerte cada pelota, aunque sin mala leche. Estamos acostumbrados a jugar así, lo vivimos a mil. Por ahí allá están acostumbrados a menos roce, a menos fricción, pero podría escaparse una patada porque esto es un partido de fútbol", manifestó el ídolo en diálogo con 'De Una Otro Buen Momento', programa que se emite por Radio La Red.

Por último, el enganche –que volverá a ser suplente– fue consciente y realista a la hora de analizar lo que sucederá en el campo de juego y destacó que "será complicado", pero al mismo tiempo advirtió que "estamos esperando este partido hace mucho tiempo y vamos a salir con muchas ganas".