Los Andes cumple cien años de vida y lo festeja a todo trapo

Como si los festejos por la llegada del 2017 no fuesen demasiado, por Lomas de Zamora se respira un aire, aún mucho más, festivo. Porque Los Andes cumple 100 años de vida y sus hinchas podrán disfrutar de una gran fiesta en el estadio Eduardo Gallaron. La ‘Maquina’ del sur (tal como reza su himno) es uno de los clubes más convocantes del conurbano. Jugó varios años en primera división y hoy se encuentra militando la segunda categoría de nuestro fútbol.

Si uno camina por las calles de Lomas, verá pancartas, banderines, afiches, vendedores de banderas y miles de camisetas rojas y blancas. Las calles del estadio Eduardo Gallardon se encuentran totalmente coloridas para cuando el reloj dicte las 00:00 del nuevo año, los hinchas se acerquen a brindar por el centenario de Los Andes.

El diario ‘Olé’ juntó a varias figuras del ‘Milrayitas’ para repasar momentos inolvidables: Hernán Da Graca, Gabriel Lobos, Orlando Romero y Gustavo Turraca, referentes del pasado, presente y futuro del club.

A su manera, cada uno de ellos ha sabido dejar una marca imborrable en la historia de los lomenses. Hernán es el menor de la dinastía Da Graca, probablemente la familia más gloriosa de la institución: tanto él como su padre Abel y su abuelo Manuel se han dado el lujo de jugar en la ‘Maquina’ y todos lograron un ascenso.

Lobos y Romero, por su parte, crecieron en el club, lograron ascender a primera y hasta el día de hoy siguen cerca, a tal punto que el primero se desempeña actualmente como manager.

Turraca, finalmente, es la última joya de las Inferiores. Elegido por los hinchas como la revelación del año, es uno de los más mimados del actual plantel.  Además, junto a ellos se encuentran Oscar Ferreyra, presidente del club, y Roberto Giganti, encargado de la subcomisión del centenario. Prefieren darle el protagonismo a los ídolos, pero se les infla el pecho por ser parte de este momento de la historia.

-¿Qué es Los Andes para ustedes?

H. Da Graca: A veces parece un cuento lo nuestro. Es difícil haber vivido esto donde mi papá y mi abuelo hicieron historia. Los Andes es todo, toda la familia está vinculada. Mi abuela me hablaba más de fútbol que de cualquier otra cosa. Es parte muy importante de nuestra vida cotidiana.

Gabriel Lobos: Es mi lugar. Soy del barrio, soy hincha, estuve como jugador desde los nueve años hasta los 25 y hoy soy mánager. Puedo dar mil vueltas, pero siempre voy a terminar acá.

Orlando Romero: Es mi vida. Estuve más de 20 años en el club, vivo a cuatro cuadras y siento siempre al hincha. Además, pude ascender a Primera y eso para alguien que salió de acá es algo muy lindo.

Gustavo Turraca: Significa mucho para mí. Crecí acá, siempre soñé con esto, con jugar en Primera y ahora me dedico a disfrutarlo e intento tomarlo con calma.

-¿Qué sienten al ser parte del centenario?

DG: Estoy realmente emocionado. Más allá de los 100 años, es increíble saber que uno fue y es parte de este hito. Pasarán otros 100 años y alguien va a seguir recordando el apellido Da Graca.

GL: Es un orgullo. Es mi club, mi barrio y donde pude triunfar. Ahora queda disfrutar junto a la gente de la gran fiesta que haremos el domingo.

OR: Uno no cae en lo importante que somos para la gente. Fueron muchos años, muchas alegrías, muchas tristezas, siempre con esta camiseta. Vivir el centenario y estar en todo este preparativo es algo realmente lindo.

GT: A veces no caigo y mis viejos me aconsejan que tome consciencia de todo esto. Es realmente muy lindo, hay que tratar de disfrutarlo lo más posible.

En medio del festejo, queda claro que Los Andes está en crecimiento y quiere más tanto institucionalmente como futbolísticamente. Con los pies en la tierra, el presi Ferreyra aclara: ”Queremos crecer y aún tenemos que establecer algunas estructuras para dar el salto. Ascender sería la frutilla del postre, pero también como dirigente quiero dejar obras”. Igual, los símbolos del club se animan a soñar...

-¿Qué deseo tienen para el club en este cumpleaños tan importante?

Todos: Los Andes es muy grande y de la mano de esta dirigencia se puede soñar con cumplir lo que nosotros y los hinchas queremos: subir a Primera, donde merecemos estar.