El exjugador del Barcelona de Guardiola devenido empresario -es uno de los dueños de la Kings League- no piensa en el juego sino en el negocio, no le interesa tanto el planteo de un equipo o la mejor táctica para ganar un encuentro, como le atrae el dinero.

Eso lo lleva a bastardear al fútbol -al que considera aburrido- para atraerlo a los tiempos acotados de los videos en las redes sociales.

Sin que nadie haya reclamado jamás por esto, ahora se la agarró con las igualdades con el marcador en blanco, para lo que sugirió una idea paupérrima.