La insólita estrategia de un arquero para atajar un penal
El arquero del Sparta Praga, Florin Niță, fue decisivo en el partido del pasado domingo cuando enfrentaron al Olomouc por una fecha de la liga checa. El rumano atajó un penal con el partido empatado 2 a 2. Pero lo que más llamó la atención fue el gesto previo al lanzamiento:
Con el partido empatado el penal podía decidir el encuentro. Nita esperó el lanzamiento con los brazos en jarra por detrás de la espalda y con una postura relajada, como entregado. Y con velocidad felina se arrojó a un costado para contener el disparo.
Tal vez no haya tenido mucho que ver la actitud del arquero o no haya conseguido poner nervioso al ejecutante, pero logró su cometido. Una acción clave para que el Sparta lograra el triunfo 3 a 2 como visitante.