No es que los hinchas sabaleros no escuchen más las canciones de Los Palmeras, ni que los músicos hayan perdido el sentimiento por el club de sus amores.

Pero hubo un hecho que fue el desencadenante de que el orgullo de Colón de Santa fe por tener en su estadio un mural con el grupo de cumbia haya llegado a su fin.

No se trató de otra cosa que de una cuestión de política interna. Bastó que los integrantes de Los Palmeas posaran con Hernán Letcher, expresidente del club que tiene un juicio por administración fraudulenta, acusado como responsable de la crisis institucional, económica y deportiva que terminó con el descenso en 2014, para que los actuales dirigentes tomaran cartas en el asunto.

El club decidió, como represalia, tapar el mural de Los Palmeras del codo norte del Estadio Brigadier General Estanislao López, inaugurado en el primer aniversario de la enorme movilización de la hinchada a Paraguay para asistir a la final de la Copa Sudamericana.