En varias oportunidades Barros Schelotto manifestó su disconformidad por el plantel que heredó del ciclo de Rodolfo Arruabarrena. A su vez, en reiterados casos retó delante de las cámaras a sus jugadores en los entrenamientos. Varios de ellos no le rinden ni le responden y el DT quiere cambios en su plantel lo antes posible.

Por ello, Guillermo ya encontró la oportunidad para comenzar con el recambio en su plantel. Si Boca clasifica a los octavos de final de la Copa Libertadores, el entrenador tiene decidido incorporar, al menos, dos jugadores. Y así se lo comunicó a la dirigencia.

La particularidad no es ninguna casualidad: a ambos ya los dirigió en Lanús, en su único antecedente como entrenador. Se trata de Paolo Goltz y del paraguayo Víctor Ayala. El primero de ellos actualmente milita en el América de México, donde es titular y referente del equipo. El segundo, aún juega en el conjunto del sur del conurbano bonaerense, que es líder de la zona 2 del Torneo de Transición.

El exdefensor de Huracán y Lanús se puso al tanto del interés de Boca y le hizo un guiño al club de la Ribera. "No es imposible que vuelva a la Argentina. Pero todas estas cosas las tomo con pinzas, me pasaron muchas veces. En 2010, cuando fui a Lanús, se habló de Boca. Ahora trato de estar calmado", manifestó Paolo Goltz.

"Yo digo siempre lo mismo. Boca seduce, pero estoy tranquilo porque a mí no me llegó nada. Tengo contrato por un año más en América. Por supuesto que hay que negociar con al América si un club me quiere", explicó el zaguero en diálogo con Closs Continental, programa que se emite por Radio Continental.

Por último, elogió al club y al cuerpo técnico del 'Mellizo', en una clara muestra de deseo. "Boca siempre tira, pero trato de estar al margen. Hasta ahora, siempre fueron simplemente palabras y nunca tuve la oportunidad. Mi mejor momento fue con el profesor Javier Valdecantos. Los conozco a los 'Melli'. Arranqué de capitán con ellos en Lanús. Ese conocimiento tira un poco más", sentenció.

El caso del volante polifuncional paraguayo parece ser más simple de negociar. Ayala, que fue el primer refuerzo de los Schelotto cuando llegaron a Lanús, quedó relegado en el 'Granate' desde la llegada del entrenador Jorge Almirón. Luego de cuatro años en el club del sur, parece que le llegó el momento de dar el salto y pasar a un equipo grande.