Se conocen desde hace tiempo. Juntos vivieron jornadas felices, éxitos y campeonatos que quedaron grabados en la memoria de los hinchas. Ahora la historia vuelve a juntarlos y todo indica que habrá un final feliz.

Cuando Lionel Messi concurrió con su hijo Thiago a dejar su voto en las elecciones para elegir al nuevo presidente del Barcelona dejó en claro que su compromiso con el club iba más allá que un contrato. Que quería elegir, dar su parte para conseguir el cambio.

Y aunque nunca se manifestó antes de los comicios sobre cuál era su preferencia, el entrañable vínculo que lo unía con Joan Laporta hacía presumir que su elección iba por el lado del expresidente de los años dorados del equipo catalán.

Ganó Laporta por amplio margen, y ahora los caminos quedan abiertos para que Lio repiense su futuro y continuar con el Barcelona sea algo más que una opción. Y Laporta, en su discurso de celebración, no se olvidó de Lio.