Una insólita determinación tomó un árbitro en la Liga Nacional de Honduras. El arquero le tocó la cola al delantero, en un gesto amistoso y sin violencia alguna, pero el juez del encuentro sancionó penal y expulsó al portero.

Ocurrió durante el partido entre Real Sociedad y Marathón, donde Junior Morales, el defensor del arco de este último equipo, le propició una caricia a Henry Martínez, que el pito, a instancias del juez de línea quien informó sobre el episodio, interpretó como una agresión.