El futbolista argentino Luciano Galletti debió abandonar la práctica profesional en septiembre de 2010 sin tener la certeza de por qué. Tras hacerse estudios, se descubrió que sufre de una nefropatía. "Fue un virus que me agarré con la Sub 20 en México y, por suerte, me dejó jugar hasta los 30 años", reveló el propio delantero.

Su situación requiere de un transplante de riñón para continuar su vida con normalidad y, en el mejor de los casos, volver a jugar al fútbol profesionalmente. Quién le otorgará dicho órgano será Rubén Horacio Galletti, su propio padre.

La intervención será el próximo 2 de octubre, en una clínica de Palermo. "Están afectados los dos riñones y este es el momento de la operación. Hicimos varios estudios y mi mamá y mi papá son compatibles, pero eligieron a mi padre porque fue deportista, es hombre y tiene el riñón al 100 por ciento", informó el ex jugador de Estudiantes, Atlético de Madrid y Zaragoza, entre otros.

Rubén Horacio, su padre, fue futbolista entre 1971 y 1984, y se destacó en Estudiantes de La Plata.

"Es una operación sencilla. El más dolorido será mi padre que (el riñón) se lo van a sacar de la espalda", expresó Galletti.

El "Huesito" disputó 13 partidos con el seleccionado mayor y le convirtió un recordado gol a Bolivia en La Paz por Eliminatorias. Además, tuvo recordadas actuaciones con el combinado Sub 20, donde fue goleador del Sudamericano 1999.

"Tengo ganas de volver a jugar. Sobre todo para despedirme dentro de una cancha. Tengo las puertas abiertas de Estudiantes para irme a entrenar con ellos", afirmó "Lucho" con ilusión.