Primero fue Mauricio Isla y ahora Fabricio Bustos. El primero era un anhelo de Riquelme pero recaló en el Flamengo y por el segundo empezaron las conversaciones.

Lo que parece claro es que Julio Buffarini no es número puesto para el Consejo de Fútbol de Boca y siguen buscando jugadores para reforzar ese sector.

Por eso no le ofrecen renovarle el contrato por dos años como pretende, sino sólo por uno. Y no se lo aumentan a pesar de no ser uno de los más altos del plantel.