A ningún dirigente de los clubes grandes del fútbol argentino se le pasaría por la cabeza la posibilidad que su club descienda de categoría. Ni Daniel Passarella o Javier Cantero, por citar dos casos, se sintieron en la B hasta que no se consumó el hecho.

Tras la pésima campaña realizada en el semestre pasado por Carlos Bianchi y sus dirigidos, “los fantasmas de la B” se acercaron a La Boca. Este comienzo de campeonato, en el que ‘El Xeneize’ tiene 6 puntos de 9 jugados, hizo que los mismos se alejaron. Sin embargo, su presidente, sí, nada más y nada menos que la máxima autoridad del club, Daniel Angelici imaginó como sería la situación si su institución jugara en la B Nacional.

"A uno nunca se le cruza por la cabeza jugar en la B. Pero si eso me sucede, terminaría mi mandato y me iría a casa. Las responsabilidades caen sobre el presidente, pero es compartida, incluso por los entrenadores que hayan pasado", señaló Angelici en diálogo con radio Cooperativa. En contrapartida a lo declarado, ‘El Tano’ apoyó a su par de Independiente, Javier Cantero, ante la iniciativa de un grupo de socios del club de Avellaneda para que finalice su mandato antes del 14 de diciembre del corriente año: "debe terminar el período por el que fue elegido". Ponete de acuerdo Daniel.

Por otra parte, el presidente de Boca se refirió a las polémicas salidas de Erviti y Silva. "Walter me dijo en diciembre que ya no tenía voluntad de seguir, pero le pedimos que se quede seis meses más y lo de Santiago fue más una decisión del cuerpo técnico que decidió apartarlo del plantel". ¿Palito para el Virrey?

También reconoció la barra de Boca, denominada ‘La 12’, cuenta con “60 o 70 personas que son delincuentes”. Recordemos que hace unos meses, el propio Angelici dijo no conocerlos.

Otro de los grandes problemas que sufre Boca es la imposibilidad del hincha que no es socio de ir a la cancha. Sin embargo, no todos los abonados o asociados al club van a lo totalidad de los partidos que se disputan en La Bombonera. Por esta razón, alrededor de 7000 hinchas se reunieron el lunes pasado en las puertas del estadio para reclamar que ese remanente se venda a los no socios.

Daniel Angelici afirmó que está “convencido que la solución es la construcción de una nueva cancha”. Y que aquellos hinchas que quieran ir a ver a Boca de local tendrán que hacerse socios adherentes. La pregunta es: ¿no sería mejor que ese remanente de entradas que no son utilizadas por los socios se las vendan al hincha común lo cual le daría un mayor ingreso económico a la institución y la posibilidad de disfrutar de una Bombonera repleta?

El presidente de Boca habló y dejó más dudas que certezas. La posibilidad de irse a la B, la no lucha contra los barras, la imposibilidad del hincha común de ir a la cancha. En fin, ¿estás nervioso Daniel?